La cuarentena hizo que Maluma cancelara su gira y se refugiara en su lujosa casa en Medellín, propiedad que compró hace tres años y que comparte con su familia. La mansión cuenta con un hogar a leña al que describe como "su santuario". Además, tiene un piano, un sector con almohadas y alfombras para compartir momentos con sus seres queridos, una sala de juegos con mesa de Ping Pong, un espacio donde colecciona camisetas de futbolistas de todo el mundo, una pileta y un parque enorme. ¡Es hermosa la casa de Maluma!