El momento de Harry Styles
No aguantó las exigencias de una clase de relajación.
El inglés fue hace unos días a una clase de yoga en la que se dictaba una de las vertientes físicamente más exigentes de esta disciplina: el Bikram. Es una variedad que hizo que el artista se encerrara con sus compañeras en un aula a 40 grados centígrados para ejecutar 26 posturas.Pero la condición de "nuevo" le pasó factura y le hizo pedir un descanso antes de que terminara la lección, ya que estaba débil físicamente y provocó risas y burlas.Un allegado a Harry contó: “No fue capaz de soportar el calor que hacía en esa habitación, sobre todo porque la clase duraba 90 minutos y era muy intensa en términos de posturas y estiramientos".Igualmente cuentan que HS estuvo siempre con una sonrisa de oreja a oreja.