Sin opción
Amy Winehouse se ve obligada a deshacerse de sus once gatos.
La cantante Amy Winehouse tuvo que deshacerse de sus 11 gatos que tenía en su casa, y los ha entregado a un abrigo de animales.
La intérprete de Rehab no podía atender a sus mascotas, que habían tomado el control de su casa en Londres, y con la situación incontrolable Amy decidió llamar a un refugio de animales y pedir que se llevaran a sus mascotas.
"Estaba muy preocupada porque les quiere muchísimo, pero tuvo que renunciar a ellos". Pese a lo difícil que le ha resultado dar el paso, no era la primera vez que la cantante se ve obligada a tomar tal decisión, pues recientemente tuvo que regalar dos de sus gatos a su ahijada, Dionne Bromfield.