Con sus fans
El intérprete de "Grace Kelly" invitó a sus seguidores a un bar para celebrar el lanzamiento de "We are golden".
Pudo haber sido una calculada estrategia de marketing o una invitación espontánea e inocente. Mika quería festejar la salida de su nuevo disco, We are golden, y no tuvo mejor idea que invitar a sus fans que lo siguen por twitter a tomar algo en un bar local.El cantante quedó más que sorprendido cuando arribó a las 18.30 hs. al Ground Floor Bar, ubicado en el oeste de Londres, y vió a más de 300 de sus seguidores esperando encontrarse con su estrella preferida.Como buen hombre de palabra, el intérprete de “Grace Kelly” cumplió su parte del trato: le invitó una pinta a cada uno de los asistentes y tuvo que pagar las consecuencias de tan generosa invitación. La factura final fue de 25 mil libras. Ouch. “Les compré a mis fans una pinta por ser brillantes”, señaló contento el músico. Si miran detalladamente la fotografía, verán a Mika en el medio de un manojo de fans.